Receta Okonomiyaki

El Okonomiyaki (お好み焼き) es un plato japonés muy popular en los restaurantes japoneses, tiendas de comida, e incluso ha comenzado a aparecer en los puestos de comida callejera en algunos mercados.

Estas tortillas saladas (que no pizzas, como se suelen llamar en occidente) son realmente sabrosas. Tanto si eres un amante empedernido de la cocina japonesa como si no la conoces demasiado, seguro que esta receta te encanta.

Quizás hayas visto cocinar okonomiyaki en algún restaurante japonés. Los chefs suelen tener la parrilla a la vista de los clientes para poder ver cómo lo cocinan, y aunque parezca difícil y requiera destreza, en realidad es bastante fácil para replicarlo en casa.

Esta tortilla está compuesta principalmente por col rallada, harina, huevos y agua. Se trata de un plato muy versátil que tiene muchas adaptaciones y se pueden utilizar varias opciones de cobertura, de hecho, su nombre es muy revelador en este aspecto: "Okonomi" significa "lo que te gusta" y "yaki" lo podemos traducir como "a la parrilla".

En Japón, la masa y los ingredientes difieren de una región a otra, pero los tres estilos principales son Kansai (Osaka), Hiroshima y Tokio. Mi favorito es el estilo Kansai, que además es la versión principal de Okonomiyaki y la más común en Japón.

El ingrediente más común que encontrarás son las tiras finas de panceta de cerdo, pero como su nombre indica, puedes poner lo que quieras: gambas, pulpo, queso, etc.

Una vez que hayas añadido la cobertura y cocinado la tortilla, puedes servirlo con salsa Okonomiyaki, mayonesa, copos de bonito, algas marinas y pepinillos encurtidos.

Para cocinarlo no necesitas la típica plancha japonesa. Si lo has visto hacer alguna vez, puede que te haya tirado atrás no disponer de este elemento para cocinar, pero lo cierto es que puedes hacerlo en cualquier sartén, o incluso en una barbacoa, si dispones en ella de una superficie lisa.

Okonomiyaki es un plato que resulta especialmente divertido para cocinar con tu familia o amigos. Gracias a su versatilidad, todos pueden aportar su granito de arena y combinar los ingredientes que más les gusten.

Tiempo de preparación: 15 minutos

Tiempo de cocción: 10 minutos

Tiempo total: 25 minutos

Raciones: 4 personas

Ingredientes

200 ml de agua
1 cucharadita de dashi en polvo
160 g de harina
4 huevos
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de azúcar
480 g de col finamente picada
40 g de chalota picada
40 g de Tenkasu
160 g de bacon en tiras finas
Copos de bonito, para adornar
Jengibre encurtido, para adornar
Aonori, para adornar
1 cucharada de aceite de oliva
1/4 taza de salsa okonomiyaki

Elaboración

Disuelve el dashi en polvo en el agua para hacer el caldo dashi (o utiliza directamente un caldo dashi casero).
Coloca la harina en un tazón grande y añade la sal, el azúcar y el caldo dashi. Mézclalo y resérvalo.
Divide la col picada, las chalotas y el tenkasu en 4 tazones pequeños. Añade un huevo, 1/4 de la harina y 1/4 de la mezcla de dashi en cada tazón. Después, asegúrate de mezclarlo bien.
Calienta la placa, la sartén o donde lo vayas a cocinar a 200 grados y vierte la mezcla de un tazón. Coloca encima el bacon picado, y los copos de bonito.
Cuando el borde del okonomiyaki esté firme y cocido, dale la vuelta con cuidado. Tápalo durante unos minutos para que se cocine con el calor.
Gira el okonomiyaki una vez más para verificar si la carne está cocinada. Remátalo con la salsa okonomiyaki, y decóralo con jengibre encurtido, más copos de bonito y espolvorea el aonori para servir.

NOTAS

Puede que algunos ingredientes se te escapen si no eres un habitual de la cocina japonesa. Te recomiendo que vayas a comprarlos a alguna tienda asiática de alimentación, donde los encontrarás sin problemas.

Tenkasu es una tempura de patatas fritas, se trata de un alimento que estará en la tienda de alimentación asiática, pero si no lo encuentras, puedes hacer la receta que te indico en el enlace. Del mismo modo, aonori es un alga verde comestible, que también podrás encontrar en este tipo de establecimiento.

La cobertura de copos de bonito añade sabor al plato, pero si no te gusta o no tienes el ingrediente a mano, también puedes obviarlo, te saldrá igual de bueno, créeme.

La salsa yo la compro hecha, pero si no encuentras ninguna, puedes probar a hacerla tú mismo. Para ello, tendrás que mezclar 2 cucharadas de salsa de tomate, 2 cucharadas de salsa Worcestershire, 1 cucharada de salsa de ostras y 1 cucharadita de miel o jarabe de arce.

Valores nutricionales por ración: