Recetas Japonesas

Comida nipona sin salir de casa

Sopa de miso

Si has visitado algún restaurante japonés alguna vez, seguramente habrás probado la sopa de miso. Se trata de uno de los platos más tradicionales de Japón, que se sirve prácticamente en cada comida.

Si eres un amante de este plato, hoy te daré las claves para que lo puedas hacer fácilmente en tu casa. Y créeme, te sabrá mucho mejor que la que has probado al salir a cenar fuera. Es súper fácil hacer una auténtica sopa japonesa de miso con sabroso dashi casero.

Sopa de miso

La mayoría de las comidas japonesas se sirven con un tazón de arroz al vapor y una sopa japonesa tradicional llamada Sopa Miso (味噌汁). Como la toman cada día, los ingredientes van cambiando, dependiendo de la estación, la región y también de las preferencias personales de cada uno.

Habitualmente, la sopa de miso consta de tres componentes: caldo dashi, miso (pasta de soja) y otros ingredientes.

¿Qué es Dashi? Dashi es un alimento tradicional en la cocina japonesa, y representa la base de la sopa. De hecho, la sopa de miso NO es una sopa de miso sin dashi, ya que es la parte más importante. Se trata de un caldo fundamental en este tipo de gastronomía, sin el cual no se entiende la cocina japonesa.

Hay varios tipos de dashi que puedes elegir para hacer sopa de miso. Si eres vegetariano o vegano, puedes hacer Kombu Dashi. De lo contrario, puedes hacer (Awase) dashi con kombu (algas marinas secas) y katsuobushi (atún seco y ahumado en escamas finas). Algunos prefieren hacer sopa de miso con Iriko Dashi (dashi de anchoas).

Puedes hacerlo tú mismo desde cero, o comprarlo ya preparado. Por lo general, siempre lo hago desde cero porque es mucho más simple y rápido que hacer caldo de pollo o vegetales. Todos los ingredientes para el dashi casero los puedes encontrar en las tiendas de comestibles japonesas y en la mayoría de las asiáticas.

Si prefieres la opción comercial para ahorrar tiempo, puedes encontrar dashi en polvo en muchas tiendas de comestibles asiáticas y online. Sin embargo, la mayoría de las marcas contienen GMS. Si vas a utilizarlo, agrega polvo de dashi justo antes de agregar el miso para maximizar el sabor.

Por su parte, el miso ((味噌) es una pasta de soja fermentada, y se elabora con semillas de soja, granos (arroz o cebada al vapor), sal y koji (un iniciador de la fermentación). Se deja fermentar en barriles de madera de cedro a temperatura ambiente de seis meses a cinco años. Dependiendo del tiempo de fermentación, tendrá un color más o menos oscuro, y también será más sabroso.

El tazón de sopa de miso japonés contiene unos 200 ml de líquido. La salinidad del miso varía según los tipos y las marcas, pero como regla general, se añade una cucharada (20 g) de miso por tazón de sopa de miso (200 ml de dashi).

Si te parece que la marca de miso que usas es demasiado blanda, puedes mezclar de 2 a 3 tipos de miso para obtener sabores más complejos. Hay muchos tipos de miso para elegir en Japón (¡como el queso!).

Y recuerde, NUNCA hiervas la sopa de miso una vez que le agregues el miso porque pierde sabores y aromas.

El resto de ingredientes se agregan, o bien antes de cocer o bien después, dependiendo del tiempo que necesiten para hacerse. Las verduras de raíz, como la patata, las zanahorias, o el nabo tendrán que ponerse antes, para cocinarlas a fuego lento y que se hagan bien.

Ingredientes que se añaden ANTES DE HERVIR DASHI:

  • Daikon
  • Cebolla
  • Kabocha
  • Patata
  • Nabo
  • Zanahoria
  • Almejas

Sin embargo, los ingredientes que se cocinan rápidamente, como las cebolletas, los puerros, mitsuba (hierbas japonesas), y yuzu se agregan justo antes de servir, ya que se hacen rápidamente.

Ingredientes que se añaden DESPUÉS DE QUE EL DASHI ESTÉ HERVIDO:

  • Repollo o col
  • Brotes de soja
  • Berenjena
  • Quingombó
  • Espinacas
  • Champiñones Shimeji
  • Hongos Maitake
  • Setas Enoki
  • Hongos shiitake
  • Aburaage (bolsa de tofu frita)
  • Tofu
  • Yuba (cuajada de soja)
  • Alga Wakame
  • Cebolletas verdes/ cebollino
  • Negi (cebolla verde larga)

Tiempo de preparación: 10 minutos

Tiempo de cocción: 15 minutos

Tiempo total: 30 minutos

Raciones: 2 personas

Ingredientes

Para el caldo Dashi:

  • 1 litro de agua
  • 20 g de kombu (algas secas)
  • 3 tazas de katsuobushi (escamas de bonito secas)

Para la sopa de miso:

  • 500 ml de dashi
  • 2-3 cucharadas de miso
  • Los ingredientes de tu elección:
  • 1 cebolleta (finamente picada)

Cómo hacer sopa de miso

  1. Empieza preparando el dashi. Limpia el kombu con un paño húmedo con cuidado de no lavarlo, pues le quitarías el sabor más importante. Después, ponlo en una olla con e agua, y deja que hierva a fuego bajo. Antes de que hierva retira el kombu o te amargará el plato.
  2. Añade el Katsuobushi y deja que hierva a fuego lento durante 30-60 segundos. Apaga el fuego y deja reposar el katsuobushi durante 10 minutos. Cuela el contenido y ya tienes listo el caldo.
  3. Ha llegado el momento de añadir los ingredientes que tardan más en cocerse. Si prefieres no usar los ingredientes de este tipo, puedes saltarte este paso.
  4. Una vez haya hervido, añade el resto de ingredientes como las setas o las hojas verdes. Igual que hemos indicado en el paso anterior, si tu sopa no contiene este tipo de alimentos, puedes saltar al siguiente paso.
  5. Lo siguiente es añadir lentamente el miso. Puedes empezar con dos cucharas de miso para 500 ml de dashi. Eso sí, una vez incluyas el miso, procura no hervir la sopa de nuevo, porque perderá todo el sabor.
  6. Ahora puedes añadir el wakame y el resto de ingredientes que no requieren cocción. Después, sírvelo inmediatamente.

NOTAS

En esta receta hacemos dos raciones de sopa de miso, por lo que tienes el doble de caldo que necesitas. Te recomiendo que lo guardes en la nevera y así podrás usarlo otro día.

Lo mejor es que intentes que no te sobre sopa, mejor guardar solo el dashi, ya que la sopa miso está más buena recién hecha. Sin embargo, si quieres guardarla, puedes dejarla enfriar a temperatura ambiente y luego guardarla en la nevera, pero no más de 24 horas. Asegúrate de que no hierve cuando la vuelves a calentar.

Sopa de miso: Propiedades

Los japoneses toman sopa de miso diariamente, ya que creen que esta deliciosa y sanadora sopa garantiza una buena salud. Estos son sólo algunos de los beneficios para la salud de la sopa de miso:

  1. Ayuda a mantener un sistema digestivo saludable: Con sus beneficiosos probióticos, beber sopa de miso ayuda a mejorar la digestión general y la absorción de nutrientes.
  2. Buena fuente de nutrientes: El miso es rico en minerales, así como en cobre, manganeso, proteínas, vitamina K y zinc. Beber un tazón de sopa de miso al día es como tomar un suplemento natural para tu salud.
  3. Bueno para los huesos: La sopa de miso proporciona muchos minerales que fortalecen los huesos como el calcio, el magnesio y el manganeso, lo que ayuda a reducir el riesgo de desarrollar osteoporosis.
  4. Mejora tu corazón: Se sabe que los compuestos químicos naturales del miso, como la vitamina K2, el ácido linoleico y la saponina, reducen el riesgo de enfermedades cardíacas y reducen el colesterol.

Ahora que has aprendido sobre los beneficios para la salud de la sopa de miso y cómo hacerla en casa, ¡espero que disfrutes de esta nutritiva sopa todos los días!